Nihil es el séptimo álbum de estudio de KMFDM. Se estrenó en la cuspide de la era Industrial-Gothic el 4 de Abril de 1995 por Metropolis Records
En su Bandcamp se puede realizar la compra del álbum.
Es gracioso que este disco sea el primero que coloque como recomendación dentro del blog. Eso es precisamente por que personalmente es de mis discos favoritos de KMFDM. A pesar de que no es mi favorito al 100%, si considero que es de los mejores records que ellos han sacado hasta el momento, además de que es los que mejor rating tienen.
Nihil es una cátedra distópica repleta de ritmos arrasadores y con letras provocadoras. Uno de los álbumes estrellas para la resistencia de la cultura underground industrial de aquella época y que sigue resonando durante estos años. Nihil terminó colocar a KMFDM como un ícono delindustrial_rock, si no que al tener temas tan pesados, que les abrió un espacio hacia una audiencia más amplia, dándoles la oportunidad de levantar aun más sus tópicos contestatarios.
Desde los primeros acordes, este disco nos atrapa con “Ultra”, un track que combina guitarras abrasivas y sintetizadores agresivos, encapsulando la furia que caracteriza al resto del álbum, es como spoiler de lo que nos van a presentar en los próximos minutos. La producción, pulida pero nunca pulcra, permite que cada grito y cada riff hierva con intensidad, en un caldero de sonidos corrosivos.
La crítica social es un filamento que atraviesa el disco, más notablemente en temas como “Juke-Joint Jezebel”, que se ha convertido en un himno de las pistas de baile obscuras y sudorosas, donde los beats industriales y coros contagiosos sirven de fondo para el descenso nocturno hacia la rebeldía cultural.
Sin embargo, es la diversidad de sonidos lo que verdaderamente distingue a Nihil. La habilidad de KMFDM para fusionar elementos del metal, techno y rock en un tejido coherente es evidente en pistas como “Beast”, “Search & Destroy” o “Flesh” , que no solo incitan a la reflexión sino también al movimiento, un llamado a las armas, la revolución y al caos.
Nihil es más que un álbum de música industrial; es un artefacto de una era, una crónica que no se contenta con ser fondo musical sino que reta a sus oyentes a despertar, escuchar y rebelarse.